domingo, 23 de noviembre de 2008

¿Censura?

(Noticia publicada el 22-11-2008 en Libertad Digital)

Miles de personas han clamado este sábado a favor de la libertad de expresión y contra el caciquismo del CAC, el órgano censor de la Generalidad. Bajo el grito de "libertad, libertad", los congregados han portado decenas de pancartas así como banderas catalanas y españolas.
La afluencia ha sido tal que la policía autonómica se ha visto en la obligación de cortar gran parte de la calle Entença -de cuatro carriles- en la que se sitúa la sede del Consejo Audiovisual de Cataluña, pese a que el Ayuntamiento de Barcelona no tenía intención de hacerlo. Tampoco se retiraron los vehículos estacionados en la zona, impidiendo el acceso de las personas. Pese a ello, han sido miles los asistentes, llamados por Ciudadanos. El PP no ha secundado la protesta, pese a enviar un comunicado en el que apelan a "la libertad de expresión en toda su extensión".
El reparto del dial catalán acabó con dos emisoras menos para la COPE -la de Lérida y Gerona- y tres menos para el grupo Vocento. De hecho, en la concentración no se han dejado de oír mensajes de apoyo hacia la emisora de la Conferencia Episcopal. "Federico, Federico", han coreado, en referencia al director de "La Mañana" de la COPE. "Queremos la COPE, queremos la COPE", han dicho en otro momento del acto.
El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha subrayado en su discurso que "somos ciudadanos, no súbditos" y recordó a las miles de personas reunidas que "desde el sofá no podemos hacer nada" contra lo que ha considerado un "oasis putrefacto". Por ello, indicó que "cada vez somos más los que no queremos mirar a otro lado" por lo que "tenemos que pasar a la acción".
Rivera habló ante las puertas del CAC, entre numerosos gritos de los reunidos en favor de la libertad de expresión, recordó que este organismo "es el guardián de esta supuesta nación inventada" aunque puntualizó que "detrás del CAC está la mano de la Generalidad". Denunció además que en un supuesto organismo independiente siete de sus diez miembros hayan sido diputados o alcaldes y tengan sueldos de hasta 130.000 euros.
"Nos enfrentamos al neocaciquismo", indicó el parlamentario catalán. Dijo que la esencia es que aunque no se esté de acuerdo con las opiniones de los medios de comunicación exista la libertad y posibilidad de poder escucharlos. En este sentido, añadió que "si no nos movemos los ciudadanos no lo va a hacer nadie".
Por su parte, otro de los representantes de Ciudadanos, Jordi Cañas, deleitó a los presentes con un discurso claro y sin complejos y denunció que el objetivo final de medidas como la del CAC es contribuir a la "construcción nacional". "El nacionalismo necesita una ciudadanía manipulada y manipulable y el principal obstáculo para conseguirlo es la libertad de expresión", aseguró.
Subrayó también que el Consejo Audiovisual de Cataluña tiene un coste para los catalanes de diez millones de euros anuales, un organismo que "pretende amordazar a los medios" en esta comunidad. De hecho, afirmó que las atribuciones del CAC son "únicas en toda Europa", propias "de regímenes totalitarios" y denunciadas por organismos internacionales.
Calificó de "advertencia" la retirada de las licencias a varios medios de comunicación como a COPE que, a su juicio, ha sido realizada con "un mecanismo perverso, el crimen y el castigo". "Quien critica al poder es castigado", señaló. El objetivo es que los propios medios de comunicación sean "sumisos" y se apliquen una censura previa.
Cañas subrayó que "cuando la verdad y la libertad se convierten para los nacionalistas en valores prescindibles queremos decir que seremos un baluarte de la libertad y la defenderemos siempre". Y acabó con un "viva la libertad".

Fotografía de Erwin Wum